Los muchos Che Guevara

Su imagen se convirtió en una las más conocidas y emblemáticas del siglo XX. Jean-Paul Sartre lo describió como el ser humano más completo y sus enemigos lo llamaron un carnicero implacable. Pero aún hoy, a 40 años de su muerte, el Che Guevara sigue siendo un personaje enigmático.

Por Javier Lizarzaburu, de BBC Mundo

Cada quien parece tener una imagen internalizada del líder marxista. Para otros, Ernesto Guevara de la Serna (Argentina, 1928 - Bolivia, 1967) es tan solo un rostro de moda, que se lleva en la camiseta que encontraron en un mercadillo de Rabat o Manila.

Sin embargo, un elemento en común es que el Che vivió y ejerció su influencia durante uno de los periodos más duros y conflictivos de la historia contemporánea de América Latina.

Fue la época en que nuestro continente le dio al mundo las figuras del dictador, el guerrillero y la república bananera. La dignidad de todo un continente parecía estar en juego. Fueron años también en que los movimientos de izquierda luchaban, o soñaban con luchar, contra el "imperio" -también conocido como Estados Unidos.

Urnas vs armas

América Latina fue la inspiración fundamental para el Che. Más precisamente, el paisaje de injusticia y desigualdad que encontró durante sus viajes a lo largo del continente.

No es casual entonces que Guatemala fuese una parada crucial. Lo que vio aquí le convenció de que la vía para acabar con esas desigualdades no eran las urnas sino las armas.

A principios de la década de los 50, el país centroamericano había elegido presidente al socialista Jacobo Árbenz. Sus intentos de reforma agraria y de mayor independencia de Estados Unidos le ganaron la etiqueta de comunista.

La participación de la CIA en la caída de Árbenz dio pie no sólo a otra larga etapa de dictaduras sino también a una de las guerras civiles mas cruentas que haya visto nuestro continente.

Para Guevara la lección era clara y los años siguientes los pasó junto a Fidel Castro en una aventura revolucionaria que triunfó en 1959 y los llevó al poder en Cuba.

El último viaje

En 1965 el Che decide abandonar el país, renunciando incluso a su nacionalidad cubana, para llevar la revolución a otras partes del mundo. Después del fracaso en el Congo, el jefe guerrillero llega a Bolivia a finales de 1966.

Pero esta misión duró poco. El 8 de octubre de 1967, en un operativo apoyado por la CIA, fue capturado por las fuerzas militares del país y ejecutado un día después. Acto seguido le cortaron las manos y su cadáver permaneció oculto durante 30 años.

Es entonces cuando la leyenda del Che empieza a crecer y el revolucionario consigue un lugar prominente en el panteón del imaginario popular.

El hombre de la mirada profunda. El luchador trágico. El seductor y el implacable. Todos los Ches murieron, o nacieron, ese 9 de octubre. Tenían 39 años.

En este especial de BBC Mundo recordamos esas últimas semanas de vida en la selva boliviana. Para ello, conversamos con algunos de los personajes que, queriéndolo o no, pasaron a formar parte de ese escenario histórico.

Fuente: BBC Mundo en Español

Para más informaciones vea el dossier "40 años recordando al Ché", en la sección A fondo